31.5.10

Diabetes y Pérdida de Visión



Existen enfermedades como la diabetes que requieren de un control severo con la finalidad de que no se desarrollen problemáticas asociadas a la enfermedad. Un buen control de la glucemia evitaría la gran cantidad de casos de ceguera irreversible que aún hoy se producen en nuestro país en pacientes diabéticos. Por lo que respecta a posibles tratamientos, las inyecciones intravítreas están presentando grandes logros en el control de estas lesiones producidas por culpa de la diabetes.

El doctor Sergio Bonafonte, director del Centro Bonafonte de Barcelona y co-autor de un libro sobre esta enfermedad ocular, destaca los buenos resultados que el tratamiento de inyecciones intravítreas ofrece en este tipo de pacientes.

Diabetes y Visión

Un mal control de la diabetes puede afectar gravemente a la estructura de la retina. ¿Por qué? La retina tiene muchas vías metabólicas muy complejas que quedan alteradas cuando se produce un exceso de azúcar en sangre. La retinopatía diabética pasa por la alteración de estas vías y la producción de unas sustancias tóxicas que llegan a degenerar la retina, primero con microhemorragias, luego con escapes de líquidos hacia la mácula y también con la generación de unos vasos que pueden sangrar y provocar la ceguera.

Inyecciones Intravítreas, la solución

Las inyecciones intravítreas tienen unas indicaciones concretas pero en ningún caso son sustitutivas del tratamiento con láser. Estan indicadas sobre todo en casos en que no se responde bien al tratamiento ya aplicado o cuando el edema es difuso. El paciente nota muy poco el pinchazo en el globo del ojo ya que se añaden unas gotas en la superficie que mitigan esa sensación de dolor. De todas maneras la mayoría de ellos llegan a la consulta algo angustiados por el pensamiento de esa punción.

Formación de Neovasos

En las fases más avanzadas de diabetes aparecen unas arterias de nueva formación llamadas neovasos. Estos neovasos ocupan toda la cavidad vítrea y son formaciones angiogénicas porque son de sangre. Su tratamiento pasa por la aplicación de un fármaco específico que impida su aparición por medio de las inyecciones intravítreas. En caso de que ya hayan salido, los fármacos atrofian estos vasos con la finalidad de que no sangren. Si por el contrario estos vasos ya han producido hemorragia será inevitable pasar por quirófano para solucionar el problema.

Fármacos Angiogénicos

Estos fármacos se usan tanto en degeneración macular como en enfermedades del ojo que puedan producir hemorragias. Fundamentalmente hay dos: Lucentis y Avastin. Estos dos fármacos tienen una efectividad similar, aunque en la degeneración macular asociada a la edad solo está aprobado el primero. Pero según palabras del doctor Bonafonte, el Avastin presenta menos complicaciones por lo que en el resto de patologías se suele usar más.

Investigaciones

Ahora mismo se está investigando en muchos campos de la retinopatía diabética. La pérdida visual se produce fundamentalmente por la atrofia de neuronas en la retina,es decir, por la pérdida de la sustancia que la mantiene y por alteraciones tóxicas en el tejido neuronal de la retina. Se están buscando fármacos que actúen incluso antes de que hayan aparecido las lesiones vasculares y una vez han aparecido, para evitar la degeneración neuronal.

Fuente: www.vivirmejor.es

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